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En el capítulo anterior de Contabilidad para Rapaces, estuvimos hablando sobre el Balance de situación de una empresa.
En él veíamos como era la situación patrimonial del negocio en un momento determinado: sus bienes, derechos y obligaciones.
Hoy te voy a explicar otra herramienta fundamental en la contabilidad básica, que es la cuenta de Pérdidas y Ganancias. Que complementa con su información al Balance de situación.
La cuenta de Pérdidas y Ganancias no es un detalle fijo de los datos de la empresa, sino que nos muestra tendencias o evoluciones del negocio.
En ella no encontraremos bienes, derechos u obligaciones, es más sencilla y espartana a la hora de darnos información, pero también más precisa.
Tan solo registra los Ingreso y los Gastos que hay, nos da igual si estos se han cobrado o se han pagado ya o no.
Recuerda:
- Ingreso: operación que aumenta el valor del negocio.
- Gasto: operación que disminuye el valor del negocio.
- Si los ingresos son superiores a los gastos tendremos beneficios.
- Si los gastos son superiores a los ingresos, tendremos pérdidas.
Recuerda que en esta cuenta no medimos si hemos cobrado o pagado, esto lo completamos revisando conjuntamente esta Cuenta de Pérdidas y Ganancias con el Balance de situación.
Podemos tener un beneficio de 10.000 € pero no haberlo cobrado aún y no tener ese dinero en el banco. O bien podemos tener unas pérdidas de 5.000 € y no haberlas pagado aún y seguir teniendo ese dinero en nuestra cuenta bancaria.
Lo interesante de la cuenta de Pérdidas y Ganancias es aprender cómo hemos llegado a dar beneficios o pérdidas.
Es una cuenta muy buena para detectar qué errores hemos cometido durante un ejercicio y cómo mejorar nuestra gestión.
Para ello os propongo un recorrido, de la mano de Ecoaerem, un ecommerce de venta de productos de limpieza ecológica para empresas en el que participo como socio.
Con este ejemplo vamos a conocer y distinguir:
- Los tipos de ingresos de un negocio
- Los tipos de gastos de un negocio
- Los resultados que puede tener un negocio
Empecemos…
Los tipos de ingreso que hay en un negocio
Cuando comenzó Ecoaerem mis socios y yo nos propusimos vender todo lo vendible para poder hacer crecer el negocio lo más rápido posible.
Pensábamos que nuestra única fuente de negocio sería la venta de productos que teníamos expuestos en nuestra web.
Pero nos sorprendió ver que había más líneas de ingresos que la que nosotros pensábamos.
Identificamos tres tipos de ingresos diferentes:
- Ingresos por ventas: son los que conseguimos gracias a la propia actividad del negocio. En mi caso era vender productos de limpieza a través del ecommerce.
- Se les llama también “ingresos de explotación”.
- Un negocio no debe ceñirse a tener una sola vía de ingresos de explotación.
- En nuestro caso, también dábamos servicios de limpieza a empresas que lo requerían.
- No sólo vendíamos un producto, también dábamos un servicio asociado.
- Se les llama también “ingresos de explotación”.
- Ingresos extraordinarios: son los que no tienen que ver directamente con la actividad del negocio, también se les llama “ingresos atípicos”.
- Se dan de forma esporádica.
- En nuestro caso, por ejemplo vino con la venta de una furgoneta que aportamos al inicio del negocio y que luego no utilizábamos.
- Al venderla obtuvimos unos “ingresos atípicos”.
- Ingresos Financieros: se originan porque se cede capital a terceros. Pueden ser:
- Intereses cobrados por meter dinero en el banco o en un fondo de inversión.
- Dividendos por tener acciones de otras empresas.
- Ganancias logradas al vender acciones de otras empresas que están en nuestro poder.
- En nuestro caso, por ejemplo Ecoaerem prestó dinero a otra empresa del grupo y tuvo unos ingresos por ello, en forma de intereses.
Los tipos de gasto que hay en un negocio
En cuanto a los gastos asociados al negocio, existen unos cuantos más. Ya que siempre es más fácil gastar el dinero que ganarlo, por lo que hay más formas de que se vaya de nuestros bolsillos y más formas de categorizarlos.
En la cuenta de Pérdidas y Ganancias vamos a identificar cinco tipos de gastos, de diferente naturaleza.
Pero que haya cinco tipos de gasto, nos sirve para ser más precisos y saber cuales son nuestros agujeros por los que se escapa el beneficio de la empresa.
Identificamos estos cinco tipos de gastos como:
- Aprovisionamientos: es lo que cuestan los bienes (o servicios) que vendemos. En el caso de Ecoaerem, lo que nos cuesta adquirir a fábrica los productos de limpieza que luego nosotros vendemos en nuestra web.
- Gastos de Explotación: son los “gastos generales” necesarios para que el negocio funcione. En el caso de Ecoaerem, lo que nos cuesta el alquiler de la nave donde almacenamos el stock de productos, por ejemplo. La web, la publicidad, etcétera.
- Gastos Extraordinarios: son “gastos atípicos” no relacionados con nuestra actividad. Son gastos difíciles de predecir, como los derivados de la crisis del coronavirus por ejemplo. En el caso de Ecoaerem, lo fueron los gastos derivados de arreglar la nave tras una inundación por lluvias torrenciales.
- Gastos Financieros: son los que provienen de pedir prestado dinero a terceros. Los más comunes son los intereses que cobran los bancos tras pedir un préstamo. Nosotros por ejemplo hemos pedido una línea ICO de financiación que devenga intereses mensuales, que son gastos financieros para el negocio.
- Impuestos sobre el Beneficio: es un gasto anual que tenemos cuando damos beneficio (o sea cuando nuestros ingresos superan a nuestro gastos) a final de año. Debemos de pagar un porcentaje de ese beneficio a la Agencia Tributaria. Actualmente está situado en un 25% para las Pymes.
Los resultados de un negocio
Como hemos visto anteriormente, la diferencia entre ingresos y gastos será el resultado de la cuenta de Pérdidas y Ganancias.
Y tendremos beneficios o pérdidas en función de si hay más ingresos que gastos o viceversa.
Pero podemos obtener más información añadida si combinamos y comparamos algunos ingresos con algunos gastos concretos.
De tal manera podemos conocer diferentes resultados como:
- El Margen Bruto:
- Es la diferencia entre las ventas de la actividad de la empresa y lo que costó producirlas.
- En nuestro caso, la diferencia entre lo que hemos vendido de productos de limpieza a través de la web y los gastos derivados de adquirir esos productos.
- Aquí irían incluidos, además de lo que os costó el producto que luego vamos a vender, los gastos de logística, distribución, seguro…
- Esta información es muy útil para saber si estamos produciendo caro o no, por ejemplo.
- Beneficio de Explotación:
- Es restarle al Margen Bruto aquellos gastos generales del negocio.
- En nuestro caso, restar el alquiler de la nave, luz, agua, gastos de personal…
- Nos da como resultado lo que genera la empresa sólo con su actividad.
- Si esto sale negativo, mejor dedicarse a otra cosa.
- Beneficio antes de intereses e impuestos (BAII):
- Para obtenerlo, le sumamos los ingresos extraordinarios, que son aquellos ajenos a la actividad principal de la empresa.
- Y le restamos los gastos extraordinarios, que son aquellos también ajenos a la actividad principal de la empresa.
- En nuestro caso, es el resultado de sumarle el ingreso por la venta de la furgoneta y los gastos por el siniestro de la inundación.
- Beneficio antes de impuestos (BAI):
- Para obtenerlo le aplicamos el resultado financiero de nuestro negocio.
- Por un lado sumamos los ingresos financieros, por ejemplo los intereses por prestar capital a una empresa del grupo.
- Por otro, restamos los gastos financieros, que serían los intereses bancarios por solicitar un préstamo como una línea ICO al banco.
- Lo normal es que este resultado sea negativo, ya que las empresas son más de pedir prestado dinero que de prestar.
- Resultado Neto:
- Es el resultado tras restar el Impuesto sobre el beneficio.
- Lo normal es que el Impuesto sobre beneficio sea negativo e irá restando.
- Sólo en alguna circunstancia, será positivo. Cuando haya un crédito fiscal a favor de la empresa.
Ya tenemos el resultado de la empresa y ahora, ¿qué hacemos con el dinero?
¿Qué hacemos con el dinero de la empresa?
- Si el resultado final ha sido positivo:
- Lo dejamos en la empresa sin repartir, esto se le llama dejarlo en Reservas.
- Lo repartimos entre los socios, esto se llama repartir Dividendos.
- Si el resultado final ha sido negativo:
- No podemos hacer mucho, ya que no hay dinero para repartir.
- Las pérdidas las compensaremos con las Reservas existentes de otros años.
- O las compensaremos con futuros beneficios.
Ojo que si damos continuas pérdidas, podríamos estar obligados a ampliar capital o incluso a cerrar la empresa por causa de disolución.
En el caso de Ecoaerem, nosotros optamos por una estrategia combinada de reparto de dividendos y reservas.
Así refinanciamos el negocio con la parte que dejamos en Reservas y alegramos un poco nuestros bolsillos con el reparto.
En resumen, la cuenta de Pérdidas y Ganancias quedaría algo así:
VENTAS O PRESTACIÓN DE SERVICIOS |
COSTE DE LAS VENTAS |
= MARGEN BRUTO |
GASTOS DE EXPLOTACIÓN |
= BENEFICIO DE LA EXPLOTACIÓN |
INGRESOS EXTRAORDINARIOS |
GASTOS EXTRAORDINARIOS |
= BENEFICIO ANTES DE INTERESES E IMPUESTOS (BAII) |
INGRESOS FINANCIEROS |
GASTOS FINANCIEROS |
= BENEFICIO ANTES DE IMPUESTOS (BAI) |
IMPUESTO SOBRE BENEFICIO |
= RESULTADO NETO |
Bola Extra: ¿Qué es el EBITDA?
Recuerdo la primera vez que escuché este palabro tan difícil de pronunciar en castellano.
Tenía un cliente belga en el sector de la publicidad online y debía reportar semestralmente a su empresa matriz.
Y me dijo:
- Oye Dani, desde la matriz me piden el EBITDA de este semestre.
Yo me hice el entendido y le dije que ningún problema, pero acto seguido me fui a ver qué narices era eso que me pedía.
No era habitual, hasta hace algunos años, en las Pymes españolas pedir esta información, lo que se solía pedir era el beneficio de explotación.
Pero en el mundo anglosajón, el EBITDA es más habitual de pedir y se ha popularizado ya en España.
EBITDA es un anglicismo que significa “Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation and Amortization”.
Es tomar el resultado de explotación sin tener en cuenta los gastos por depreciación y amortización de los activos que tenemos en la empresa.
En mi caso, sería quitar los gastos de amortización de los equipos informáticos que tenemos en la oficina.
Por tanto, hace referencia al resultado de explotación del negocio, obviando el gasto de amortización de los activos del negocio.
Esto lo que busca es tener una imagen más concreta de lo que el negocio gana o pierde en un ejercicio, tomando solo los gastos que sean ciertos. Sin tener en cuenta lo que la maquinaria se pueda depreciar un año.
Esto puede ser interesante para evaluar empresas en las cuales sus activos (maquinaria, ordenadores, naves, etc) no representan gran volumen o no tienen gran importancia.
Pero para empresas en las que sus activos juegan un papel importante, prescindir del dato de los gastos de amortización, sería desvirtuar demasiado el resultado.
¿Te imaginas al contable de ALSA sin poner la amortización de los autobuses o al de IBERIA sin poner la de los aviones?.
Espero que con estos tres capítulos que ya llevamos te hayas convertido en un apasionado de la Contabilidad.
Mi objetivo, ya sabes, es haber podido aportar algo de conocimiento nuevo, ojalá lo esté logrando.
Si te perdiste el primer capítulo o el segundo capítulo de la serie “Contabilidad para Rapaces”, te invito a que vayas a mi blog y los releas.
Dentro de nada empezaremos a analizar negocios a través de sus cuentas, verás que es más sencillo de lo que piensas.
¡Seguimos en contacto! =)
PD: Si necesitas ayuda con la fiscalidad de tu negocio online, pide una cita y sal de dudas de una vez.